Si, le he dado dos euros con cincuenta céntimos,
si, de alguna manera le he comprado su relato. Relato más que currado y el más verosímil con el que me he topado en
los últimos días. Relato que me tranquiliza y de alguna manera me reconcilia
con mis congéneres. ¡Como me gustaría! que todos los problemas fueran como el que
ha tenido David. Podría haber pasado de David o actuar como estamos actuando últimamente
casi todos. Es decir echando leña al fuego, calentar un poco más el ambiente (
como si no estuviera ya lo suficiente calentito). Echarle la culpa del calor
que hace, del aire irrespirable que hay por culpa de los incendios, de la mala
leche que me produce los insultos que reparten a diestro y siniestro y recíprocamente,
el pues anda que tú, y el tu más. En definitiva, la crispación y el odio que
todo lo invade y todo lo ensucia. Por no hablar del la profunda tristeza e
indignación que me produce el genocidio de Gaza.
Once y cuarenta y cinco de la mañana,
de regreso a casa.
-
Hola, me llamo David, veras acabo de
salir del trabajo y me he quedado tirado, vivo en Pioz y “La Continental” me
cuesta 2,75 euros y hasta ahora solo he
conseguido 25 céntimos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario