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sábado, 31 de mayo de 2014

La guasa del güito


 Preámbulo o desencadenante de esta entrada:

 

Ya  he  escrito en alguna ocasión, que mi entrada al trabajo  coincide con la de los niños a la escuela, como el trayecto de mi casa al trabajo lo hago caminando, paso por varios colegios por lo que  me cruzo con bastantes niños, mamas y papas. También he escrito que me resulta muy agradable empezar el día así, “tomándole el pulso al futuro”.

 Gracias a este itinerario-paseo laboral estoy más o menos al día de las modas en cuanto a fiestas y juguetes infantiles, sin embargo el otro día presencie una escena, que me creo cierta desazón  a lo largo del día se fue convirtiendo en mala leche y hoy me empuja a escribir.

“La escena” fue la siguiente: Un niño entre 3  y 5 años recogió del suelo un güito, lo miro e inmediatamente le pregunto a su mama que iba unos pasos  por delante de él: Mama esto ¿ qué es? -Ahora meto lo que pensé en ese instante, iba  hacer la mama.

-          Darle una charla sobre las semillitas, las  flores, las abejas…

Pues no señores, la Sra. siguió mirando y tecleando en ese artilugio magnético- no me negarán que tienen un magnetismo del que no se libra nadie- y por decirlo en argot moderno: paso de su hijo como de comer mierda.

 Aquí termina el preámbulo

 

Me molesta sobremanera, que a la gente a la que me dirijo sea en un establecimiento público, en la calle u donde sea, no me mire a la cara, sé que soy fea, pero siempre lo he sido, eso no es una novedad y  además de no mirarme,  agachen la cabeza  y  presten más atención a una cosa, -por más imán que tenga- que a mi,  una que  es un poco ególatra y me creo mas persona que un aparato y lo que ya me acaba de matar es; cuando me interrumpen ( como no me atranco poco, para que encima me corten el hilo )y  dicen:  espera que me ha entrado un guasap y voy a contestar.

           

A mis amigos, familiares, conocidos, viandantes, vecinos y similares, desde aquí les aviso:

Cada vez que le den prioridad a “la cosa” respecto a la persona, voy hacer lo que la mama del preámbulo, es decir; pasar de ellos como de comer mierda.

 

Por si alguien no lee este blog, ahora mismo  mando un Waps para decirlo.

 

 

 

 

 

 

 

 

1 comentario:

  1. ¡Cielo! porque siempre seguirás siéndolo para mí, le habría dado un manotazo a la señora mamá con su "aparato", y entonces sí, es cuando hubiera pasado de ella como de comer mierda.
    Besos de Chano.

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