Manualidades,
reciclajes y otras mierdas
Ya se estarán
preguntando mis seguidores (por cierto bienvenida Blanqueta) por donde saldrá
esta hoy con semejante título, pues si, hoy voy a empezar hablando sobre manualidades y
reciclaje, lo que aún no se como
terminará esto.
Con las arandelas de los
botes de refrescos, cervezas, bebidas isotónicas (no sé muy bien que significa
la palabrita) pero queda como moderno deportivo y algo científico y por eso la
meto aquí. Decía que con esas arandelas se están haciendo bolsos, cortinas,
cinturones etc. etc…Algunos de estos objetos, bajo mi punto de vista, son
autenticas obras de arte, si a esto le añadimos la parte que reciclan pues miel
sobre hojuelas que diría un castizo.
La mayoría estas
recicladoras y artesanas son mujeres (hoy voy a meter porcentajes) un 95 por
ciento me atrevo a decir, con lo cual son madres, novias e hijas de algún
varón.
No me encuentro entre
el grupo de artesanas, ya que las manualidades ni se me dan bien ni me gustan,
mi labor consiste en ir recolectando estas “chapas” y dar “la chapa” a mis
amigas y conocidas.
En mi recorrido diario
paso por una plaza, la llamaré así aunque no es exactamente una.
Es la parte central de
un grupo de viviendas, habrá como doce portales con una altura de 5 pisos cada
uno de estos. La no plaza es lo suficientemente grande, para que todos los
vecinos puedan disfrutarla, en función de su edad y preferencias lúdicas.
Esta cerrada al tráfico
rodado, con lo cual los papas pueden dejar a los niños “bajar a la calle a
jugar solos y desde sus balcones
echarles una ojeada de vez en cuando. Tiene un arenero para los más pequeños
que las mamas han cedido amablemente a los perros del vecindario. También tiene
dos espacios lo suficientemente grande para se jueguen dos partidos de futbol
simultáneos, en función de la edad, e incluso con sus recovecos que hacen las
veces de portería, encima de los cuales hay un hermoso cartel que reza: Prohibido
jugar a la pelota.
En la no plaza hay más
grupos, hoy sólo mencionaré el que me inspiró para escribir esto. Un grupo de
jóvenes y no tan jóvenes (ahora meteré otra estadística) el noventa y cinco por
ciento de hombres, estos son trabajadores en paro, ya que cuando paso en
horario laboral y escolar siempre están ahí. Algunos tocan la guitarra, otros
juegan a la pelota, los más hablan entre ellos, y todos beben algo; cervezas de
litro (litronas) refrescos de lata, cerveza de lata y por supuesto bebidas isotónicas
todas de lata con su correspondiente arandela.
Cada día que pasa compruebo como este grupo va
en aumento, a la vez que disminuye el número de barrenderos de la zona, (si
aplicamos un reparto indirectamente proporcional) yo me froto las manos
mentalmente pues pienso en el día siguiente que la cosecha será excelente.
¡Y una mierda pa mi!
Todos son unos buenos padres, hijos, maridos y compañeros, ya que todas las
latas están desprovistas de sus arandelas, pero convenientemente esparcidas por
toda la plaza.
¡Haber si equilibramos
un poquito los porcentajes!
Me aosmbra que en esta entrada no hubiera ningun comentario
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