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miércoles, 6 de junio de 2012


Tengo todas las limitaciones, todas las disculpas.

Empecemos por las disculpas o limitaciones que es lo mismo pero no es igual.

Necesito las gafas incluso para encender el ordenador, las pocas veces que vienen las musas no encuentro las gafas, mientras busco las lentes, las musas se han escondido, me quito las gafas para descubrirlas y cuando las hallo, olvide donde están las gafas.

Este juego del escondite que me divertía tanto siendo niña, ahora me aburre y cansa.

Más limitaciones: no sé escribir el graduado escolar no da pa mucho. El haber leído algún libro más algún periódico (aunque en mi fuero interno crea que si) no es suficiente.

Hasta la semana pasada también tenía la disculpa que mi ordenador iba con pedales.

Esta semana “el pero” es que este ordenador tan moderno y con tantas cosas todavía no lo conozco y no soy capaz de sacar partido a esta tecnología tan avanzada que tengo entre manos.

El tiempo; esta semana tampoco lo puedo poner como excusa, tengo vacaciones y no haré ningún viaje, ya que he puesto mil y un pretexto para no hacerlo, dinero, tiempo, ganas et…

Alguno de mis seguidores del blog, pensarán que estoy deprimida, mayor, o simplemente que continuo en la misma línea de siempre.

No tengo disculpa para lo que me pasa, o sí, tengo todas las limitaciones y todas las disculpas.

2 comentarios:

  1. Yo creo que tienes un grave problema, porque creo adivinar que a veces te sientes triste, otras rezumas alegría, a veces un libro te sube a la copa de un arbol de sombra alargada, a veces una noticia te enerva, otras veces la realidad que te rodea te da para una crónica, otras para preguntarte donde coño está el futuro soñado, a veces ves a una señora vestida de pieles a la salida de la Magistral y te dan ganas de escribir un artículo sobre la sociedad alcalaina y otras de hacerle la señal de la cruz sobre el cuero vuelto con ketchup del Burguer King. Es decir, estas poseida, pero eso no es malo, es que vivir te da ganas de escribir, y las disculpas, efectivamente, no sirven, pero aunque no escribas, seguirás imaginando; te pongas como te pongas.

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  2. Que bien lees entre lineas y como me conoces, pero eso no es malo, pero a veces y solo a veces, duele.Duele que te reconozcan en tus "debilidades".
    Gracias por el comentario y besos siempre besos.

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